Los sindicatos hemos iniciado una campaña de recogida de firmas para presentar una ILP contra la reforma laboral por la que ya convocamos la huelga general del pasado 29 de septiembre. Esta reforma, como dijimos entonces, además de profundamente injusta desde el punto de vista laboral y social, está siendo inútil tanto para la creación de empleo como para la estabilidad del mismo.
Por todo ello hemos elaborado una “Proposición de ley de Iniciativa Legislativa Popular para el empleo estable y con derechos”, cuya presentación y tramitación necesitan las firmas de la ciudadanía, de las trabajadoras y trabajadores de este país, que son quienes sufren en primera persona las disfunciones del mercado de trabajo que dicha reforma no ha hecho sino agudizar.
El no detenido incremento del paro, y el de la temporalidad en el empleo, desde la entrada en vigor de la reforma laboral impuesta en 2010, nos han dado la razón en nuestras continuadas advertencias al respecto y, sobre todo, en el muy importante seguimiento que tuvo la huelga general ante lo que ha supuesto el mayor ataque a los derechos laborales en nuestro país en todo el periodo democrático. Ha sido un sacrificio de los trabajadores muy lesivo para sus intereses que, tal y como dijimos, está resultando absolutamente estéril para los fines que decía perseguir el Gobierno.
El rechazo a esa reforma laboral es el que nos lleva ahora a presentar esta “proposición de ley” para que el Parlamento le dé la vuelta a aquélla. La Iniciativa Legislativa Popular (ILP) es, en efecto, un derecho ciudadano que en este caso se convierte en una verdadera e imprescindible obligación sindical en defensa de los derechos de los trabajadores, empezando por el derecho al trabajo, por el derecho a tener un puesto de trabajo seguro y estable.
Las firmas a recoger lo son contra esa reforma regresiva e inútil, pero proponiendo una alternativa legal, fundamentada y estructurada en el correspondiente texto legislativo que revierta la actual situación y que garantice los derechos de los trabajadores.
La ILP propone diversas modificaciones en el Estatuto de los Trabajadores y en otras leyes laborales que rectifiquen, en sentido contrario, esa normativa de la reforma laboral con la que el desempleo se había situado, a finales de 2010, en 4.696.600 personas en toda España, y en 542.000 en la Comunidad de Madrid, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre del año pasado.
El amplio texto legislativo que presentamos recoge, entre otras, medidas para favorecer el empleo de los jóvenes, para acceder a un empleo a tiempo parcial de calidad, para corregir la temporalidad injustificada en la contratación, normas que den garantías en materia de subcontratación de obras y servicios, medidas para corregir igualmente la flexibilidad externa injustificada, incorporación de procedimientos para combatir la brecha entre trabajadores fijos y temporales y, muy importante, que las empresas tengan que agotar todas las alternativas sociales e individuales posibles antes de recurrir a la rescisión del contrato.
Pretendemos establecer nuevas bases más justas a nuestro sistema de relaciones laborales, en cualquier circunstancia, pero especialmente con estas medidas tan justificadas y garantistas en situaciones como la actual en que, al socaire de la crisis, los mismos que la han provocado y los Gobiernos que se inclinan ante ellos, están intentando socavar nuestros derechos como trabajadores e ir aniquilando el Estado de Bienestar que representa la gran conquista contemporánea, con sus equilibrios sociales, de la clase trabajadora.
Para llevar a cabo estos cambios tan necesarios, convocamos a todos los ciudadanos y ciudadanas de este país y, desde luego, a los de la Comunidad de Madrid, tan castigada también por el desempleo y la inestabilidad laboral, a que pongan su firma en la Iniciativa Legislativa Popular (ILP), contra la tan negativa e inútil reforma laboral del Gobierno, y con la que vamos a acudir al Congreso de los Diputados.
E igualmente vamos a exigir a los representantes políticos, libremente elegidos en las urnas, que sepan estar a la altura de sus responsabilidades y, una vez presentada la ILP, la tomen en consideración, la tramiten como proyecto de ley y, aprobándola, devuelvan a nuestra legislación básica los contenidos sociales y laborales que, de añadidura, pueden ayudar a salir de la crisis y a ir transformando el modelo productivo en un sentido de progreso que evite su repetición en el futuro y la de sus traumáticas consecuencias laborales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario